Entre la era de la hiperinformación, la velocidad en que se vive el día a día y la alta competitividad en el campo laboral, el coaching transformacional ha nacido como herramienta esencial para ayudar a las personas a evolucionar y adaptarse.
Es cierto que actualmente los negocios deben enfocarse en su transformación digital, estar al día con los avances de la tecnología, el comportamiento del mercado y de los consumidores.
Pero no se debe dejar a un lado el hecho de que toda organización grande o pequeña está compuesta por personas. Son estas las que aportan ideas y toman decisiones, trabajan en equipo y echan a andar las empresas.
Es por eso que el crecimiento personal de cada individuo influye en el éxito del negocio. Especialmente sus líderes deben tener la capacidad de mantener a sus equipos de trabajo motivados y mejorar las relaciones entre los miembros para lograr mayor productividad.
En este sentido, el coaching transformacional es una excelente alternativa para alcanzar el máximo potencial de los empleados a favor de los objetivos de la empresa.
Conociendo el mundo del coaching
Obviamente las organizaciones están compuestas por individuos con personalidades y vivencias particulares que son reflejadas en sus actitudes. Y en muchos casos, aunque un empleado tenga excelente formación académica y experiencia para desempeñar sus funciones, sus habilidades blandas también forman parte determinante de su desenvolvimiento.
Sin embargo, la mayoría de las personas no saben manejar emocionalmente las situaciones difíciles que se les presentan, bien sea personales o profesionales. Es aquí donde es muy conveniente la intervención de un coach.
Se trata de alguien entrenado para identificar esas dificultades que se convierten en limitantes o barreras, afectando el alcance de los objetivos. Su rol principal es facilitar el desarrollo de las potencialidades de los individuos, acompañándolos durante el proceso.
Es importante señalar también que el coaching se diferencia de los procesos psiquiátricos o psicológicos en que se ejecuta a corto plazo. Las sesiones se hacen en un máximo de 20 entrevistas, mientras que las terapias y los tratamientos medicados pueden tardar meses o años.
¿Qué es el coaching transformacional?
Existen varias vertientes del coaching como el ontológico, el sistémico y el relacionado con la Programación Neurolingüística (PNL). Así mismo, se clasifican según el entorno en donde se desarrollan, creándose así el coaching ejecutivo y el coaching de vida. Finalmente, tomando las mejores herramientas de los dos últimos surge el coaching transformacional.
Este tipo de coaching tiene como finalidad desarticular, resolver, generar cambio y transformación a través de cuestionamientos y reflexiones de la problemática y la historia personal.
Beneficios del coaching transformacional en tu negocio
Transitar el camino del coaching transformacional trae grandes beneficios no solo para el que lo emprende sino también para todos aquellos con los que se relaciona, incluyendo equipos de trabajo y empresas.
Algunos de los efectos que produce el proceso del coaching transformacional son:
- Crear estrategias de liderazgo diferentes.
- Promover ambientes de confianza para formar equipos de alto desempeño.
- Adelantarse a los problemas y diseñar un futuro poderoso.
- Coordinar acciones para obtener resultados óptimos.
- Establecer una relación con la acción desde una perspectiva fuera de lo común.
- Incorporar observadores de distintos tipos, generando así nuevas respuestas a situaciones repetidas.
- Relacionarse con otros de manera más productiva, favoreciendo el trabajo colaborativo.
- Modificar la comunicación y alcanzar desempeños más efectivos.
- Ser un observador diferente ante los escenarios y circunstancias que se presentan, considerando un abanico más amplio de posibles soluciones.
En fin, encarar un proceso de coaching transformacional es un viaje personal para construir una mejor versión de sí mismo. Al ser aplicado a los integrantes de una empresa, inevitablemente conlleva a consolidar equipos más poderosos y efectivos.
Indiscutiblemente, contar con individuos felices que desarrollan su máximo potencial, se traduce en mayor productividad para tu negocio y en la construcción de una organización sana.