Las amenazas potenciales en Internet se encuentran a la orden del día. Tomar medidas de prevención ante el posible acceso no autorizado, uso, alteración, interrupción o destrucción de tu sitio web es estrictamente necesario.
Garantizar la privacidad de los datos, el funcionamiento óptimo de los recursos informáticos y la continuidad de los servicios bajo el control total del dueño o administrador del sitio web, es un reto perfectamente alcanzable.
Pero para poder aplicar las estrategias y emplear las herramientas adecuadas, es recomendable conocer primero la importancia de implementar protocolos de seguridad de datos y cuáles son las amenazas más comunes que suelen darse en el mundo digital.
¿Por qué es importante proteger tu sitio web?
Actualmente, la información se traduce en “poder” en forma de gigabytes, proteger tu sitio web significa salvaguardar uno de los activos más valiosos que poseen las organizaciones. Estrategias de negocios, propiedad intelectual, datos de clientes, proveedores y empleados, entre otros, pueden ser vulnerados.
En otras palabras, toda la información que gira alrededor de los procesos administrativos y operativos de la empresa quedaría expuesta a disposición de delincuentes cibernéticos, si no se implementan mecanismos de seguridad apropiados.
Por otro lado, para darnos una idea de la cantidad de amenazas presentes en América Latina, veamos algunos números. Según un reporte de Kaspersky Lab, en la región se registraron 45 ataques de virus por segundo durante el último año. Igualmente, el reporte de ESET Security para Latinoamérica en el 2019 indica que el 61% de 2500 empresas investigadas, sufrió infecciones de códigos maliciosos.
Tus usuarios agradecerán y reconocerán cuando sus datos están protegidos, máxime si lo que deseas es tener un Sitio web profesional.
Amenazas más comunes contra sitios web
Habitualmente, los ataques contra sitios web están dirigidos al robo de usuarios y contraseñas con la intención de acceder al servidor o inclusive destruir los datos. En otros casos, la intención es extraer detalles de tarjetas de crédito o información relacionada que permita efectuar transacciones bancarias fraudulentas.
Además, pueden ser víctimas de piratas informáticos capaces de inhabilitar el sitio para afectar su prestigio, así como también provocar pérdidas económicas.
Algunas maneras en que los cibercriminales logran esto son:
- Redirección a sitios maliciosos usando métodos de clickjacking.
- Usurpación de identidad a través de Cross-Site Scripting (XSS) y Cross Site Request Forgery (CSRF).
- Ataques a bases de datos mediante técnicas de inyección SQL.
- Colapso del sitio web a causa de acciones referentes a Denegación de Servicio (DoS).
Medidas de protección ante amenazas potenciales
La seguridad de un sitio web es un aspecto modular que se toma en cuenta desde el principio. Pasando por escoger los proveedores de hosting y el CMS (Content Management System), hasta el empleo de algunos elementos de diseño y programación, proteger los sistemas de ataques internos y externos es un trabajo constante. Además de esto, existen herramientas y técnicas que se pueden utilizar en el día a día, entre estas se encuentran:
Gestión de claves de acceso. Promover el uso de contraseñas fuertes y cambiarlas con regularidad es fundamental. Adicionalmente, se aconseja implementar la autenticación de dos factores solicitándole al usuario que ingrese otro código como los enviados vía mensaje de texto a un teléfono móvil, por ejemplo.
Instalación de Certificado SSL. Básicamente este certificado permite el intercambio de datos de manera cifrada entre el servidor y el usuario. En nuestro post qué es un certificado SSL y por qué lo necesitas puedes conocer mucho más detalles sobre este importante protocolo de seguridad que no debe faltar en tu web.
Creación de estrategias de almacenamiento de datos. Guarda y muestra solo los datos esenciales. Como en el caso de manejar números de tarjetas de crédito o cuentas bancarias, dejar visible solo la cantidad de dígitos suficientes para que el usuario pueda identificar su producto financiero, pero no tanto como para que pueda ser copiado por un atacante y utilizado en un sitio externo.
Otras consideraciones a tener presente son:
- Elegir un proveedor web con protección contra DoS.
- Efectuar actualizaciones del CMS y sus plugins.
- Usar herramientas de escaneo de vulnerabilidades.
- Contar con una Web Application Firewall (WAF) robusta.
- Hacer copias de seguridad del sitio en la nube y mantener respaldos en almacenamiento local en casos de emergencia o migración.
Como consejo final, mantenerse atento con las nuevas formas de cometer delitos en la web, que lamentablemente siguen evolucionando a la par de la tecnología.